Después de unos compromisos familiares, me tocaba salir a dar una vuelta así que nos fuimos por el camino del Ebro en dirección a Pina. Soplaba un cierzo importante así que la ida la hicimos a todo que daba, la vuelta fue otro cantar. Dimos por terminada la vuelta en la presa de Pina, pensando en que la vuelta sería dura. Un día tranquilo y divertido por los caminos de la ribera, por una zona que no había estado nunca.
|
Poco antes de llegar al Burgo. |
|
En el Burgo de Ebro. |
Y para avabar bien la excursión una delicisa comida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario